.
Mostrando entradas con la etiqueta imperio británico. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta imperio británico. Mostrar todas las entradas

miércoles, 18 de junio de 2008

Los ingleses, por Henry James



Lo único que el Príncipe sabía con certeza acerca de los ingleses era que "les situations nettes" no les gustaban. Por nada del mundo estaban dispuestos a aceptarlas. El genio nacional inglés, el éxito nacional inglés, siempre habían consistido en evitar dichas situaciones en todo momento. Con complacencia, los ingleses estimaban que este peculiar talento era lo que ellos denominaban su maravillosa capacidad de transigir, cuya influencia impregnaba de tal manera el lugar en que ahora se encontraba nuestro héroe que parecía, de una manera más clara, que la tierra y el aire, la luz y el color, los campos, las colinas y el cielo, los pueblos de los condados azul verdoso y las frías catedrales, debieran el especial matiz de su tono a dicha capacidad.

Henry James. La Copa dorada. Alba Editorial SL. Barcelona. 1998. Trad.: Andrés Bosch Villalta. El fragmento se encuentra en la p 332.

lunes, 21 de enero de 2008

Darwin en la Patagonia


Muchos de los seguidores de Darwin no se limitan a destacar las cualidades de su obra, sino que expresan opiniones a su favor que, a menudo resultan exageradas, haciendo pensar que su exégesis es más bien parte de un montaje.

Podemos contrastar algunas de las opiniones de sus seguidores con sus propios escritos obtenidos de su diario y la conclusión deberá ser que Darwin era, sin lugar a dudas, algo más rudo que como nos lo pintan.

Por ejemplo, sin ir más lejos, Ayala dice en el artículo publicado en PNAS que mencionábamos en la entrada anterior:

Darwin's greatest contribution to science is that he completed the Copernican Revolution by drawing out for biology the notion of nature as a system of matter in motion governed by natural laws. With Darwin's discovery of natural selection, the origin and adaptations of organisms were brought into the realm of science. The adaptive features of organisms could now be explained, like the phenomena of the inanimate world, as the result of natural processes, without recourse to an Intelligent Designer. The Copernican and the Darwinian Revolutions may be seen as the two stages of the one Scientific Revolution……….etc,etc….


Pero veamos, a cambio, cómo se expresaba, cómo opinaba este gran sabio en sus viajes acerca de cuestiones mundanas. Tomemos una muestra de su correspondencia:


Letter to Caroline Darwin

23 Oct 1833
Buenos Aires

We are in a pretty state in this nice city. They think nothing of cutting the throats of 30 prisoners, whom they happened to take the other day: and they are right; for what is it to quietly stabbing all the indian women above 20 years old or younger if ugly?. Oh! these creoles are such a detestably mean unprincipled set of men, as i hope this world does not contain the like. There literally is one Gentleman in Buenos Aires; the english minister.


En este texto, Darwin parece más bien una persona de poca sensibilidad. Más que una la mente privilegiada en la que quiere hacernos pensar Ayala, podríamos imaginarnos a alguien con una oportunidad privilegiada que todavía hoy siguen publicitando sus partidarios por motivos que distan leguas de la Ciencia.

miércoles, 18 de julio de 2007

Coda con figuras victorianas


La exposición internacional de Londres en 1851 marcó el momento cumbre en una época en la que el Imperio Británico se sentó en la presidencia del mundo.

Documentos ejemplares presentando aspectos importantes en torno esa época son:



1) La Saga de los Forsyte, de John Galsworthy. Historia de una familia en la que nos demuestra la importancia obsesiva y omnipresente del dinero, su penetración en todos y cada uno de los aspectos de la vida, que no ha cesado hasta la actualidad. Aquel sistema económico ha crecido y ha invadido el mundo.



2) Las novelas de Arthur Conan Doyle, en las que se manifiesta la confianza, propia de entonces, en el razonamiento que llega a considerarlo capaz de entender el mundo. Hoy las posibilidades de la razón han encontrado sus límites; tanto en general, como en el terreno de la ficción. Lönnrot, detective en la novela “La muerte y la brújula”, de Jorge Luis Borges, siguiendo esquemas de razonamiento similares a los de Holmes, acaba siendo inocente víctima de sus perseguidos.

3) La obra de Charles Darwin, en la que se interpreta la naturaleza de manera simple y acorde con los tiempos imponiendo un lenguaje antropomórfico en el que domina la selección, la competición y la lucha, conceptos todos inadecuados en la descripción de la naturaleza. Darwin no es responsable del empeño, propio del siglo XX, por mantener la llamada Teoría de Evolución por Selección Natural, que no es una Teoría Científica, como si lo fuera. Si se hubiese tratado de una Teoría Científica, el lugar ocupado por el empeño en mantenerla habría sido ocupado por el empeño en refutarla, actitud propia de la mentalidad científica con toda teoría.
A diferencia de lo que ocurre en el mundo de la ficción y en otros muchos aspectos del mundo real, la razón todavía no ha desarrollado su plena competencia en el estudio de la naturaleza, porque muchos de los resultados de la Biología han sido cubiertos bajo estas ideas peregrinas que ahora el viento se deberá llevar. Es ahora el momento de ejercitarse y ver hasta donde la razón puede llegar en la interpretación de los datos de la Biología, cuando esta se libere de visiones torpes que han tenido sus resultados en secuestro. Por eso, claramente, la Biología es para pensar.





Blogalaxia: ~ Technorati: ~ AgregaX: